lunes, 13 de enero de 2020

El Tenzo Kyōkun de Dōgen - comentado por Kōshō Uchiyama

Normalmente en occidente el budismo, y en particular el budismo de escuela zen, a menudo ha sido asociado casi exclusivamente, si bien de manera errónea, con la práctica de la meditación sentada, denominada en japonés zazen. Sin embargo el budismo, que no consiste en otra cosa que el camino que lleva a comprender el malestar inherente a la existencia humana, su causa y el camino que conduce a la liberación de ese malestar, no se reduce solo a la práctica de la meditación sentada, sino que abarca todos los ámbitos de la vida.

Esto, si bien es una característica presente ya desde sus orígenes, se radicaliza en China, en especial en el budismo chan (zen en japonés), especialmente a  partir del considerado tradicionalmente como cuarto patriarca de esta escuela, Dayi Daoxin (580-651, Dōshin en japonés). Si hasta entonces la forma de subsistencia de los monjes dependía de los laicos, por medio de la mendicidad religiosa, Daoxin introduce junto a esta, o incluso sustituyéndola en algunos casos, una innovación, el trabajo manual como forma legítima, también en el caso de los monjes, de garantizar la propia supervivencia. A partir de esta reforma, rechazada por algunos que veían en ello una transgresión de las reglas monásticas clásicas, o vinaya, el chan adquiere una de sus características diferenciales, mantenida de ahí en adelante como un tema central de las enseñanzas chan; si bien este rasgo, posteriormente, en muchos casos ha sido preservado solo de forma simbólica. La práctica religiosa se extendía de esta manera a todos los aspectos de la vida, incluyendo aquellos hasta entonces reservados a la comunidad laica.

Seis siglos después Eihei Dōgen (1200-1253), uno de los principales exponentes de la escuela Zen japonesa de todos los tiempos, escribirá el Tenzo Kyōkun (Instrucciones al cocinero), dirigido en un principio al cocinero de la comunidad monástica, pero cuyo sentido profundo contiene indicaciones de carácter universal aplicables a todas las actividades cotidianas, sin importar que uno sea monje o laico, señalando así el valor y la importancia desde el punto de vista espiritual incluso de las más pequeñas entre estas. La importancia de dicho texto para Dōgen queda remarcada por el hecho de que lo incorpora como primer capítulo de su Eiheishingi (La reglas [del monasterio] de Eihei-ji), la comunidad monástica fundada por él en 1244; si bien  el texto es anterior, siendo terminada su redacción en 1237 en Kōshō-ji, el primer monasterio puramente zen de Japón, fundado también por Dōgen antes de su definitivo traslado al monte Eihei.

Ocho siglos después Kōshō Uchiyama (1912-1998), del cual pueden encontrarse numerosos escritos en este blog (pulsar en la etiqueta Kosho Uchiyama, en el recuadro de etiquetas de la columna lateral, para ver todos) y del que dimos ya algunos apuntes biográficos en la anterior entrada (ver aquí) y en otras, retoma el texto de Dōgen, actualizándolo desde un punto de vista contemporáneo a través de una serie de comentarios, en los que señala y aclara los aspectos esenciales del mismo. Al mismo tiempo Uchiyama nos muestra como el texto de Dōgen indica la manera a través de la cual podemos hacer que nuestro zazen actúe también a través de las actividades cotidianas. 

El texto de Dōgen, en la versión simplificada de Uchiyama, así como los comentarios de Uchiyama, sobre el mismo se agruparon en un libro titulado, en su versión en ingles, How to cook your life (Como cocinar tu vida), cuya traducción al castellano comenzamos a ofrecer hoy aquí. Esta traducción ha sido realizada por Carlos Collar, un buen amigo de este blog, y tiene un carácter privado, por lo cual se ofrece igualmente para su exclusivo uso personal. Periódicamente iremos ofreciendo uno a uno los distintos capítulos del libro de Uchiyama, que serán reagrupados al final en un único texto en formato pdf. Comenzamos hoy con la publicación del texto de Dōgen, que servirá de base a los posteriores comentarios de Uchiyama, los cuales iremos ofreciendo periódicamente. Para descargar el texto pulsar el enlace de la siguiente línea.


La numeración a pie de página del archivo adjunto en esta entrega, así como la de las siguientes entregas, o capítulos del libro original de Uchiyama, corresponde a la que será su numeración final una vez todo integrado en un único archivo.

 ___________________ 

Traducción del texto de Uchiyama: Carlos Collar Menéndez
Introducción y maquetación: Roberto Poveda Anadón
Fotografía: Internet

4 comentarios :

  1. Gracias por compartirlo, Roberto

    ResponderEliminar
  2. Compartirlo ha sido lo más fácil, gracias sobre todo a ti por el gran y desinteresado trabajo de haberlo traducido. _/\_

    ResponderEliminar
  3. Gracias por compartir este texto. Quedare pendiente de nuevas entregas. Desde las montañas del parque farallones en Colombia

    ResponderEliminar
  4. el malestar de la vida humana abarca todos los skandas que entiendo son los ambitos de la vida sicofisica entonces la meditacion debe tratarse de ser conciente en todo momento.

    ResponderEliminar

Si deseas dejar un comentario, has de tener una cuenta en Wordpress, Google, OpenId, Blogger o cualquier otro sitio de autentificación de usuarios.
Gracias por tu visita y por tu comentario.